Cada año, el 21 de mayo, la UNESCO encabeza la celebración del Día Mundial de la Diversidad Cultural para el Diálogo y el Desarrollo, destacando no solo la riqueza de las culturas del mundo, sino también el papel esencial del diálogo intercultural para lograr la paz y el desarrollo sostenible.
Es un día reservado para apreciar las diversidades culturales entre diferentes países, estados y personas en el mundo. Este día es de gran importancia ya que las tres cuartas partes de los principales conflictos del mundo tienen una dimensión cultural. Esa es una porción realmente grande del pastel relacionada con la cultura. Esto ha llevado a los esfuerzos de las Naciones Unidas y la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) para frenar esto en un intento por lograr uno de sus principales objetivos: traer la paz al mundo.
La diversidad cultural puede verse a través de diversas manifestaciones: creencias religiosas, música, lenguaje, arte, trabajo y en toda actividad humana. Porque en todo lo que hacemos, las personas reflejamos nuestra cultura como comunidad, sociedad o nación. Y esas características particulares, no solo son hermosas, sino que enriquecen nuestra vida espiritual, moral, afectiva e intelectual.